tag:blogger.com,1999:blog-7286052136888180543.post9117466468172561906..comments2023-05-31T02:13:32.414+02:00Comments on candelero: El amor vence a la muerteUnknownnoreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-7286052136888180543.post-818984409110880002008-02-03T23:21:00.000+01:002008-02-03T23:21:00.000+01:00Comentarios al post en su anterior ubicación:Autor...Comentarios al post en su anterior ubicación:<BR/><BR/><BR/>Autor: <A HREF="http://irethblue.blogspot.com/" REL="nofollow">Ireth</A><BR/><BR/>No conocía el poema de Vallejo y es realmente bello. En cuanto a la idea de resurrección, me gusta pensar que es en términos de la memoria y la conciencia donde ésta se produce, que no es una resurrección material, sino que el afecto o amor a una persona hace que ésta y sus pensamientos o forma de vida revivan y permanezcan.<BR/><BR/>Pues sí, Amor y Muerte van unidos desde siempre, hay algo que los une. Hoy mismo nos comentaban en clase que podían encontrarse sarcófagos romanos con representaciones de Amor y Muerte unidos, no creo que sea el único caso. Eros y Thanatos, algo que tan bien desarrolló el gran Freud. Desde los mitos aparecen juntos: el amor provoca la fatalidad y muerte de los amantes (Píramo y Tisbe, Leandro y Hero, Orfeo y Eurídice, ... y más tarde claros ejemplos como los inmortales Romeo y Julieta). En la tradición literaria el amor que provoca la muerte con destinatario mundano (aunque idealizado) o vuelto a lo divino como hicieron los místicos, o la muerte que da la vida, paradojas para expresar lo inefable.<BR/><BR/>Qué son sino los cementerios o necrópolis, cualquier forma de enterramiento: una manera de conservar en la memoria y en la tierra los restos de los seres que hemos amado, como una forma de vencer a la muerte, de trascenderla.<BR/><BR/>Y, curiosamente, el Amor ligado a la Muerte, pero también en el discurso sexual o erótico si nos paramos a pensarlo: llamar “petite mort” al orgasmo y otros empleos del lenguaje relacionado con ambos campos significando el acto sexual. Y yéndonos a desviaciones psicológicas nos encontraremos con la necrofilia (los términos griegos son transparentes: ambos opuestos unidos) o el gusto por lo que parece carente de vida.<BR/><BR/>Bella selección la que recoges Dani, hay tantas muestras... Amor y Muerte son dos de los grandes pilares, por no decir los principales, que rigen la vida del ser humano. El Amor vence a la Muerte o, al menos, nos gusta pensarlo.<BR/><BR/>Fecha: 27/03/2007 21:51.<BR/><BR/><BR/>Autor: <A HREF="http://candelero.blogia.com/" REL="nofollow">Daniel</A><BR/><BR/>Sin duda el amor y la muerte tienen un lugar crucial en el desarrollo del ser humano, desde que, en algún tiempo remoto, se produjera una convivencia basada en el respeto y se intuyera la supervivencia de algo en el ser humano más allá de la muerte física.<BR/><BR/>El drama del amor y la muerte está en el origen mismo de nuestra cultura: el sacrificio de Cristo por amor y su resurrección.<BR/><BR/>Gracias por tu reflexión y por los interesantes datos que aportas. Un abrazo.<BR/><BR/>Fecha: 28/03/2007 23:03.<BR/><BR/><BR/>Autor: <A HREF="http://irethblue.blogspot.com/" REL="nofollow">Ireth</A><BR/><BR/>La vida está llena de casualidades y coincidencias. Justo ayer escribo esas ideas acerca de la relación Amor(--sexo) y Muerte, y hace escasas horas ese profesor que nos lanza libros que debemos leer alguna vez en nuestras vidas nos reparte unos poemas y me encuentro con uno de Leopoldo María Panero que se titula precisamente “Necrofilia (prosa)”, el título ya dice bastante. Pero es que los primeros versos expresan lo siguiente:<BR/><BR/>“El acto de amor es lo más parecido/ a un asesinato.”<BR/><BR/>Venía perfecto aquí. El resto del poema tampoco tiene desperdicio. En fin, además, Panero siempre resulta interesante.<BR/><BR/>Como curiosidad, hay quien apoyándose en esa relación y el parecido de ambas palabras, estableció una falsa etimología y decía que “amor” constaba del prefijo privativo a- seguido de mor (de “mors”, ‘muerte’), así el amor era la ausencia de muerte. Pero esto no es cierto.<BR/><BR/>Otro tema con mucha chicha éste jeje, y con mucho hilo del que tirar (si Átropos no lo corta antes ;-)) ¡Un saludo, Dani!<BR/><BR/>Fecha: 29/03/2007 01:22.<BR/><BR/><BR/>Autor: <A HREF="http://candelero.blogia.com/" REL="nofollow">Daniel</A><BR/><BR/>Quién sabe si las casualidades y coincidencias son tales.<BR/><BR/>No me resulta muy simpático el poema que citas, me da la impresión de que ve el amor sólo como una relación de dominio, y no estoy de acuerdo con esa forma de ver el asunto. Pero quizá no acabe de verle el sentido, y tampoco sé nada del autor como para juzgar sus intenciones desde un contexto adecuado. De todas formas, es verdad que los dos primeros versos relacionan amor y muerte, y tienen su particular fuerza por sí solos.<BR/><BR/>Curiosa la falsa etimología que comentas. Siempre me han parecido divertidos ese tipo de juegos etimológicos.<BR/><BR/>Fecha: 29/03/2007 19:57.Anonymousnoreply@blogger.com